martes, 29 de abril de 2014

Días en Vilanova de Meiá.



Una Semana Santa de hacer metros.
Roca dels Arcs.

Quedo con Dani para irnos unos días a Vilanova de Meiá y pasar algunos días de la Semana Santa trepando en este lugar tan particular para mí.

El primer día decidimos de hacer un poco de deportiva, por la mañana vamos a un sector llamado Chulo Piscinas, para hacer unas vías muy fáciles y así también puede escalar Maria; después de unas pocas vías aprovechamos para comer y cambiar de sector, nos dirigimos al Contrafort de la Roca dels Arcs, donde hacemos un par de vías en la zona del Conillet Eixerit y aprovechamos para practicar la escalada artificial en una vía cerca de la Cova del Valent. Después de la jornada de escalada volvemos al pueblo para tomarnos la merecida cerveza y acabar de concretar los planes del día siguiente. Dormimos bajo el porche del refugio que esta al lado de la Ermita de Meiá.
El segundo día pinta de lo más entretenido, ya que la intención es de hacer dos vías, la primera es una clásica de la Roca dels Arcs “Navarro”. Una vía de baja dificultad y semiequipada, donde el trabajo a realizar es más mental que físico y en el que podremos practicar la autoprotección. Cinco largos para 195metros, cuatro de ellos me parecen preciosos. El grado máximo de dificultad es de V. Un juego de fisureros, uno de friends, más unas 8 o 10 cintas expres y alguna baga para encintar sabinas, es material más que suficiente para hacer la vía. Dani es el que empieza a escalar el primer largo, y en éste pasa algún que otro apuro con los alejes y con la autoprotección (tiene que volver a coger el ritmo de escalada), pero se trabaja muy bien el primer largo de 35metros. Yo disfruto bastante y al llegar a la reunión lo felicito por el buen trabajo realizado. El segundo largo lo hago yo y me parece un largo muy bonito con unas presas magnificas y una calidad de la roca excelente. Paso clave del largo está saliendo de la reunión, ya que tienes un buen aleje hasta el primer seguro y no es fácil de colocar algún seguro. El resto es de ir haciendo. Un tramo de 50 metros hasta la terraza. Un tercer largo de tramite ya que es ir caminado por la terraza durante 30 metros, hasta una gran sabina donde montamos la tercera reunión. El cuarto largo lo hago yo, el paso más complicado está en la salida de la reunión ya que el seguro vuelve a quedar bastante lejos y una caída aquí significa picar en la terraza. Un poco más arriba hay otro paso algo raro, pero que al final lo saco bastante bien (está protegido por un spit). Luego fácil hasta la gran sabina donde se hace reunión. Tramo de 40metros. Ultimo largo de la vía y para mí el más bonito de todos por su carácter de exposición ya que está limpio, vamos sin seguros. Un largo que se curra de lo lindo Dani, colocando solo friends o alliens durante 40metros, hasta llegar a la cima de la pared y montar la reunión en los bloques de la cima. Un descenso bastante rápido para mi sorpresa, ya había bajado anteriormente de esta cima y siempre había tardado más. Una vez abajo nos dirigimos al coche, para ir a la zona de picnic y comer tranquilamente para recuperar fuerzas para poder realizar la segunda vía del día.

Dani en el primer largo de la "Vía Navarro"

La segunda vía a realizar le tengo un especial cariño, ya que la había realizado antes con muy buen amigo Raúl en el año 2009, y me apetecía mucho repetirla. Esta vez nos iríamos a la Pared de Zaratrusta para realizar la vía Txubascos Bascos. Un trazado de 100metros bien equipado, con unas 10 cintas expres, más el material de reunión tenemos suficiente para hacer la vía. Le dejo a Dani que sea él quien empiece a escalar, ya que a mí me apetece hacer el segundo largo, el más espectacular de la vía. Dani sube bastante bien el primer largo de 30metros, donde el paso más complicado está en la entrada de la reunión, algo sobado por sus muchas repeticiones (clásica del sector). El segundo largo de 25metros, sale hacia la izquierda de la reunión,  después de un par de seguros la pared gana en verticalidad y sorprenderte con un patio asombroso, es un tramo que se hace bastante bien, las presas son buenas aunque también las hay de las que están sobadas. El tercer largo es el más asequible de la vía, es el turno de Dani que hace rapidísimo este tramo de 25metros. El último largo de 20metros me toca a mí, y el viento hace su presencia, éste me pone en algún apuro que otro, ya que el paso clave del largo no me atrevo a tirar por miedo a caerme. Al final después de una buena lucha lo saco relativamente bien. El descenso se puede hacer de dos maneras: una rapelando por la misma vía “OJO rapeles pendulares” y la otra caminado. Nosotros bajamos caminado por las terrazas siguiendo los hitos.

Volvemos al pueblo a tomarnos la merecida cerveza y así podernos dar una buena ducha. También aprovecho para quedar con mi buen amigo Gabriel, que se ha dispuesto a subir para escalar al día siguiente.

Reseña de Domzalski.

Quedamos con Gabriel en el pueblo y así poder concretar lo que hacer con él y si finalmente Dani y Maria se van apuntar a escalar. Éstos deciden que no van a escalar y aprovechan el día visitando la zona. Gabriel y yo nos dirigimos a la zona del Chulo Piscinas, para realizar dos vías equipadas: vía Piratas y vía Corsarios, que son asequibles para mí compañero. Estos dos itinerarios van paralelos el uno con el otro y es una buena elección para realizar una primera escalada en la zona, ya que están bien aseguradas y equipadas para rapelar. La primera vía que realizamos es la Corsarios, Gabriel que lleva algo de tiempo sin escalar, decide que ira de segundo por lo menos en el primer largo, luego ya se verá. Así que me lanzo yo hacia arriba, el grado lo tengo asumido y de momento no me afecta la acumulación de metros de los días anteriores. El largo es vertical y de una presa espectacular. Gabriel sube bien, pero decide que no ira de primero, que para él los seguros no están cerca y que se nota ya los brazos cargados. El segundo largo es aun más fácil que el primero, y lo subo relativamente rápido. A mí compañero también le parece fácil, que también lo sube rápido. Un rapel de 55metros nos coloca de nuevo a pie de vía. Una vez abajo nos hidratamos y comemos algo. Volvemos  a prepararnos para hacer la vía Piratas otro par de largos, un primero que en este sí que empiezo a notar los metros acumulados, pero que aun así lo saco con solvencia. Gabriel sube con alguna que otra parada, ya que este largo parece que la pared desploma un poco, pero sube bien. El ultimo largo le digo a Mí compañero que si quiere tirar él y me vuelve a decir lo de siempre, que no, que él ya va bien de segundo. Una vez en la reunión volvemos a montar el rapel que de una tirada de 55metros estamos otra vez en el suelo. Descenso caminado bajando por las terrazas.

Gabriel en el primer largo de la Vía Corsarios.

Unos buenos días de escalada en un lugar especial, y rodeado de muy buena compañía. Gracias amigos por compartir aventuras en la roca conmigo.    

miércoles, 23 de abril de 2014

Primer viaje a Riglos.



Gran clásica en los Mallos Pequeños, Riglos.
El pueblo de Riglos con los sorprendentes Mallos
Reseña de "la Meteo que viene"







Ficha técnica
Lugar: Riglos.
Zona: Aguja Roja.
Vía: Edil.
Dificultad: V+.
Longitud: 120m.
Material: Cintas exprés, fisureros y aliens.
Fecha: 11/04/2014.










Nos vamos a Riglos Nuria y yo, con la intención de estrenarnos en las paredes del conglomerado Riglero, y de disfrutar de un rincón idílico de la provincia de Huesca.

El Mallo Pisón.

Después de leer mucho sobre sus vías, de cual poder hacer dentro de nuestro nivel, y después de descartar grandes clásicas “por su dificultad” en los grandes Mallos (El Fire, El Pisón, La Visera, El Puro, Los Volaos, etc.) decidimos ir a escalar en la zona de los “Pequeños Mallos” y probar en una aguja preciosa: “la Aguja Roja”. La vía Edil, es nuestra elección para iniciarnos en la escalada clásica de Riglos. Una vía abierta por Alberto Rabadá y Ángel López “Cintero” el 2 de Junio de 1957.

La Aguja Roja.

Pero como la idea es estar un par de días, primero probaremos de hacer un poco de deportiva por la zona, después de mucho buscar algo coherente para nosotros, nos vamos a la “Cueva del Chumino”. Escalamos en la parte izquierda de esta, donde hay 4 vías entre el 4º y 5º, y así comprobamos como está el grado en esta zona. A la derecha de la cueva, hay unas vías algo más duras que sobrepasan el 6b (que ni por asomo probamos). Tanto Nuria como yo, nos vamos con muy buenas sensaciones de lo escalado, ya que al día siguiente será más o menos parecido en el grado.

Nuria delante de la "Cueva del Chumino"

La aproximación a la Aguja Roja es fácil; nosotros salimos desde el pueblo, caminando por un camino bien marcado, en busca de los Mallos Pequeños, pasados una balsa a unos metros sale un sendero a la izquierda, mientras subes por éste parece que estas en un jardín o parque natural de lo bien marcado que está; éste sube sinuosamente hacia el Cored y la Aguja Roja. Hasta el pie de vía nos lleva unos 40 minutos tranquilos y disfrutando del paseo y de la zona. La zona es un lugar tranquilo y solitario cerca de un pueblo bullicioso para los escaladores. Al llegar nos impresiona el puente de roca que hay entre la Aguja Roja y el Mallo de Gómez-Laguna, que es donde empieza la vía Normal, que será por donde tendremos que bajar desde la cima.

El cored y la Aguja Roja.

L1 – IV+. Es Nuria quien empieza el primer largo. Empieza por una placa para buscar el primer seguro lejos pero fácil, para luego meterse en la fisura/diedro bastante llamativo, con buenas presas, donde Nuria escalando en oposición va superando todos los pasos, mientras te aproximas a la reunión antigua ves que la pared es de aspecto liso y lavado con buena distancia entre los seguros. Un paso de V aéreo para superar la barriga, que se hace bien pero te obliga a colocarte, y así acceder a la reunión (se puede proteger bien). Yo subo disfrutando de la roca e impresionado con lo bien que ha hecho Nuria el largo. Un largo de 30 metros.

Nuria trabajandose el L1.

L2 – V. Es mi turno y delante mío tengo un largo de 40 metros de chimenea/diedro, que no se me dan muy bien y encima te obliga a escalar ya que tiene unos alejes considerables. Me complico demasiado la vida introduciéndome dentro de la chimenea, pues mi cabeza cree que cuanto más dentro menor peligro de caída (FALSO), y eso hace que no suba muy bien; paso algún que otro apuro entre seguros, donde incluso me llego a encastar el muslo contra un bolo enorme, para no caer, pero con mucho trabajo y mucha tensión consigo sacar este largo, el más difícil de la vía por su exposición. Nuria disfruta mucho de éste, el cual considera fácil y juguetón siempre y cuando tengas bien el coco con los alejes.

L2 visto desde la R2.

L3 – V+. Es otra vez el turno de Nuria, y se lanza a por el único paso de V+ de la vía, importante en éste ir subiendo los pies poco a poco, antes de intentar salir de la barriga. Los seguros alejan algo menos que en el anterior largo y las presas siguen siendo buenas. Este tercer largo transcurre con una salida de la reunión por una placa hacia la izquierda, para ir a buscar el diedro con la barriga “antes descrito”, pasada ésta sigue recto subiendo por un tramo con matorrales ya en el final del largo. Vuelvo a subir quitándome el sombrero con Nuria bien que se a currado el largo y sobre todo el paso de V+, si llego a ir yo de primero seguro que hubiera sufrido más que ella. Un largo de 30 metros bonito con un paso algo raro en la panza.

Nuria en el L3.

L4 – IV+. El último largo de la vía, el único tramo que va más con mi estilo de escalada, una placa bonita pero que se me hace corta de muy buenos bolos, que rápidamente tumba para llegar a la cima de la Aguja Roja. Nuria sube rápido los 20 metros de este tramo, disfrutando y contenta por la vía que acabamos de hacer. La reunión se hace desde los cables de acero que rodean la cima.

Nuria en la R4.

El descenso lo hacemos por la vía normal en tres rapeles hasta llegar al collado que hay entre la Aguja Roja y el Mallo de Gómez-Laguna, justo en el puente de roca que tanto nos impresionó al llegar al pie de vía. Hacemos una pequeña desgrimpada y volvemos al inicio de la vía. Y volvemos tras nuestros pasos para volver al pueblo y darnos la merecida recompensa de la cervecita bien fresca.

Fin de vía.

Unos días espectaculares con una compañera formidable, en un lugar maravilloso, al que espero no tardar en volver.